- Una persona entra en una librería. Va con prisa. Olvidó comprar un regalo para su pareja.
- «En los exámenes los estúpidos preguntan cosas que los sabios no pueden responder.»
- Los libros forman parte integral de la vida.
- «En otras ciudades, la gente inteligente sale y hace dinero. En Dublín, la gente inteligente se queda en casa y escribe libros.»
- Shakespeare no publicó nunca nada antes de 1593, año de la muerte de Marlowe. Hay quien cree en las casualidades. Hay quien no.
- El dinero canta y abre caminos en todas partes.
- ¿Leyó Frankenstein alguna vez el Quijote?
- Jane Austen vio cómo se rechazaba su primera gran obra. Pero no se rindió y siguió escribiendo.
- Dickens también leyó el Quijote.
- Dicen que hay palabras que hieren. De acuerdo. Y también hay palabras que pueden matar.
- Nunca sabremos cuántas otras novelas, obras de arte, avances científicos, vacunas, descubrimientos o maravillas se nos quedan cada día en las interminables trincheras de este mundo, en un bando o en otro.
- Nadie tenía muy claro si se trataba de un cuento para niños o de una gran metáfora sobre la existencia del hombre.
- Lo cierto es que esto de asesinar y escribir no es tan infrecuente.
- Las ilusiones mal administradas conducían a tremendos fracasos.
- Realmente lo nuevo muchas veces coincide con lo olvidado.
- Por encima de formas y formatos, más allá de los rollos de papiro, los libros de papel o los lectores electrónicos, está la perenne pasión del ser humano porque le cuenten historias.
- Quizá fue una mujer con un cuento que se inventó sobre las nubes y las estrellas para calmar el miedo de un niño.