Sinopsis
UNA DONCELLA…
Elegida desde su nacimiento para dar comienzo a una nueva era, la vida de Poppy nunca le ha pertenecido. La vida de la Doncella es solitaria. Jamás la tocarán. Jamás la mirarán. Jamás le hablarán. Jamás sentirá placer. Mientras espera el día de su Ascensión, preferiría estar con los guardias luchando contra el mal que se llevó a su familia, que preparándose para que los dioses la encuentren lo bastante digna. Pero la elección nunca ha sido suya.
UN DEBER…
El futuro del reino entero recae sobre los hombros de Poppy, algo que ni siquiera está demasiado segura de querer para ella. Porque la Doncella tiene corazón. Y alma. Y deseo. Y cuando Hawke, un guardia de ojos dorados que ha jurado garantizar su Ascensión, entra en su vida, el destino y el deber se entremezclan con el deseo y la necesidad. Él incita su ira, hace que se cuestione todo aquello en lo que cree y la tienta con lo prohibido.
UN REINO…
Abandonado por los dioses y temido por los mortales, un reino caído está resurgiendo, decidido a recuperar lo que cree que es suyo mediante la violencia y la venganza. Y a medida que la sombra de los malditos se acerca, la línea entre lo prohibido y lo correcto se difumina. Poppy no solo está a punto de perder el corazón y ser considerada indigna por los dioses, sino que también está a punto de perder la vida cuando los ensangrentados hilos que mantienen unido su mundo empiezan a deshilacharse.
Libros van,
libros vienen, fantasía, ciencia ficción y novelas históricas. Así es mi vida
como lector. Un poco de todo, y todo al mismo tiempo.
En mi
adolescencia, disfrutaba de las sagas literarias, con libros que me dejan
picado y pendiente del final. ¿Ahora? Las evito. ¿La razón? Tiempo. Ya no soy
un joven lector, ahora soy un adulto con responsabilidades, por lo que leer es
un hábito, un gusto, pero también una responsabilidad que he elegido.
Si algo aprendí
con el paso de estos años es a no gastar mi tiempo y esfuerzo en leer historias
que no van a gustarme. Pero también sé que soy un voraz lector y necio a la
hora de terminar todo lo que comienzo, así que esa es la razón por la que aquí
estamos.
Cuando De sangre y cenizas llegó a mis manos,
tuve miedo. Estoy acostumbrado a los libros grandes y sagas colosales. Pero no
quería comenzar una nueva, resentí el libro desde el primer momento, pero
tampoco quería dejarme llevar por eso, y decidí darle su debida oportunidad.
Considerando la inmensa
sinopsis en la parte de arriba, me ahorraré los detalles de la novela y me centraré en contarles mi experiencia.
De sangre y cenizas es un libro de fantasía juvenil con tintes que
van desde lo supernatural y lo mágico, con una prosa bien narrada, pero que comete
el pecado de ser demasiado extenso y poco verosímil.
Este libro me
recordó un poco a Crepúsculo, Sombra y Hueso, Trono de Cristal y Donde
cantan los árboles, y un poco a otros libros de fantasía, parte del género
juvenil/new adult que he leído
previamente, así que mientras lo leía, sabía a qué me enfrentaba y que iba a
encontrar.
Mi principal
problema con la novela fue, en parte, los personajes, que no terminaron por
completar mis expectativas. La historia, que no me atrapó lo suficiente como
para prestar suficiente interés a la trama y el desarrollo de esta. Y el mayor
de los problemas, para mí, fue la narrativa.
La novela me
resultó muy densa, lenta y demasiado extensa. Puedo entender que por lo general
este tipo de historias abarcan grandes tomos, por lo grande que suelen ser los
mundos que construyen los autores, pero en este casi no lo sentí así. Pudo ser
más ameno, menos descriptivo y resultarme de tal forma más entretenido.
Respecto a los
personajes: tenemos a una protagonista que me gustaría catalogar como una doncella
rebelde, con la perspicacia y audacia necesaria para que todo desencadene
apropiadamente, pero algo predecible en sus decisiones.
Poppy, a pesar de ser una doncella, atada a un destino y que poco conoce del
mundo, parece ser más lista de lo que parece. Su giro argumental es de 180
grados. Pasa de ser una “chica débil” a una verdadera guerrera. Pero, todo se
va al caño cuando conoce al chico que ama odiar.
El problema que presenta Poppy es que,
por si sola, pudo destacar más, sin la necesidad de un interés amoroso que va “surgiendo”
poco a poco, por así decirlo entre ella y Hawke, el chico casi perfecto y
atractivo que la historia necesita, ¿a
poco no?
Me sorprendió cómo Poppy a pesar de
tener cierta preparación e intelecto, se dejaba llevar por las opiniones de
Hawke. Chica, debes pensar por ti misma.
La hipersexualización de Hawke en cada
página, ¿era necesario para la historia?
No lo creo, pero tal vez a los y las
lectoras que aman el género podría resultarles algo ideal. Personalmente,
para mí no fue así.
Algo que nunca me ha gustado en la
literatura es el romance forzado, los
matrimonios forzados, el amor a primera vista, etc., no obstante sobre todo, ese amor que
nace del “te trato mal para protegerte”,
o sea, de este modo no van las cosas. Poppy, eres
más inteligente que eso.
La historia: cuando le conté a mi
pareja sobre el libro, le dije, es como un “crepúsculo
con esteroides”. Miren que yo amo una historia con un toque de todo, con
personajes que son para nada reales, tramas insufribles, plot twists que salen de cada esquina, sin embargo, por favor, si van a ser de esta forma, la historia tiene que tener completa coherencia y ser creíble.
Personalmente, me pareció predecible,
no estamos ante la gran revelación literaria como leí por ahí, más bien,
estamos ante un libro que con cada página esperas ya sea la última. No hay nada de que sorprenderse. No hay grandes revelaciones.
No hay una trama que me anime a seguir con los otros cinco libros.
Y en serio, no esperen que me lea el
siguiente, porque no será de esta manera. Dejaré pasar esta saga por mi estabilidad
mental y porque en serio, hay poco tiempo para leer y muchos mundos mágicos que
visitar.
En conclusión, estamos ante el ya conocido
libro de fantasía juvenil, muy al estilo de Trono de Cristal, que tampoco
recomiendo. Con personajes sosos, predecibles y amantes del dolor y las malas decisiones.
Lo único rescatable es la portada. Me encanta y doy crédito por eso.